"El vacío al desnudo", "Cien pájaros cortejando al Fénix", "Piedra y agua en el coito de los siglos", "Jazz que disipa las nubes", "El más bello jardín" y “Flujo de mar en lo sueños” son los poemarios editados de Antonio Gómez Hueso. En narrativa dos volúmenes: "Negrocarbón y las Siete Gigantas", Primer Premio del I Certamen de Relato Infantil Ecológico de la Junta de Extremadura y “Cuentos para viajar lejos”. En Teatro ha publicado: "Antonio", estrenada por la Agrupación Lírico-Dramática "Barahona de Soto" de Lucena y que es una introspección mágico-histórica sobre la vida y la obra de Antonio Machado.
Su obra puede leerse también en más de setenta antologías poéticas nacionales e internacionales y páginas literarias de Internet. Ejerce como miembro de varias asociaciones literarias. Ha desarrollado también una extensa actividad periodística como articulista de opinión y crítico cultural. Ha participado en programas literarios de la Junta de Andalucía como “Poetas en el aula”. Colabora actualmente en los programas "Circuito literario andaluz" y "Tardes con las letras" del Centro Andaluz de las Letras.
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POEMAS
ALEJANDRO VIVE
Me miras desde los siglos, Alejandro,
queriendo advertirme de algo.
Y yo sin percibir su significado.
Menas moldeó tus gestos,
Calístenes inmortalizó tus gestas
(y, como recompensa, le ejecutaste).
Sabemos de tu amor por las ciencias,
tu admiración por los animales,
tu devoción por los poemas de Píndaro.
Sabiduría y alma, las tuyas,
propensas al desenfreno emotivo,
fueron avivadas por Aristóteles
(y, como recompensa, rehiciste Estagira).
Nadie te entendió en aquellas epopeyas,
héroe frenético, ebrio de aventuras,
en pos del imperio universal ansiado.
Te veo desde las sombras, Alejandro,
y tú me sigues mirando.
¿De qué quieres alertarme,
gran conquistador del pasado?
CAPADOCIA
Fantasmas pétreos emboscados,
ejército ignimbrítico, bosque geológico,
esbeltas chimeneas de hadas,
¡ni en sueños podría imaginarte!
La luna contigo se ha emparentado.
Bendita erosión magmática
que horada, moldea y pule.
Bendita irrupción de conos basálticos,
albos, amarillos, grises y rojos,
rosáceos en los destellos del amanecer.
Bendito santo panal de existencias anónimas,
perdidas entre los siglos y el olvido.
Bendito misterio el de los monasterios,
donde el recogimiento espiritual implícito está.
Capadocia desmiente que la roca sea inane,
Capadocia santifica iglesias rupestres,
Capadocia alumbra una vida interestelar.
Estratigráfico,
me cobijaré por siempre
en tu resplandeciente oscuridad.
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