Pertenece a los grupos literarios POETAS
DE AHORA, OLIVERSANDO e INDOCENTES. Maestro gaditano, publica poemas en
revistas como “Indocencias”, “Impresiones”, “Azahar”, “El Ático
de los gatitos”, “Grito de Mujer” y “Pléyade”, y en diversas antologías
de varios autores: "Autores docentes de la provincia de Cádiz",
“Escritos con tiza”, “Enreversados”, “Poetas Andaluces de Ahora”, “Poetas de
Ahora”, “Poetas en Red” y “Poetas de Sierra Morena”. Ganó el I
Premio de Poesía de Paterna de Rivera, el II Premio del Concurso
Internacional de Poesía de Buenos Aires (Argentina), en 2018. Asimismo,
el II Premio de Sonetos del mismo concurso en 2019 y la
primera mención especial en la modalidad de Cuentos; y un accésit, junto con varios indocentes, en
el V
Concurso de Poesía de Herencia, con "La arroba en el
Parnaso". Publicó el libro “EL NONO” y el poemario “DIVAGACIÓN
NOCTURNA” y otros dos infantiles “REBELIÓN EN LA ESCUELA” y “REBELIÓN
EN EL ZOO”, ilustrado por Lola Fontecha, con quien acaba de publicar “DE
MAR A MAR”.
Tiene un blog: “Ojos de luna”, http://ojosdeluna-pacovelazquez.blogspot.com.
Ha participado en recitales y encuentros poéticos por Andalucía: “POESOHAIL”, “Cien mil poetas por el cambio”, “Poetas en Red”, “Poetas de Sierra Morena”, “Poetas de Ahora”,
“Un verano en Bornos”, “Cerdopoética”, “Ruta Poético-Botánica Parque Genovés”,
“Versos con destellos”, “Café la vida”, “Cata del aceite”, “Ruta Piel de Atún”…
También ha participado en programas radiofónicos.
Es creador y organizador, junto con la poeta jiennense Lola Fontecha,
de la tertulia mensual “PUERTA ABIERTA A
LA IMAGINACIÓN” y del “ENCUENTRO
POETAS DE AHORA” (I, IV, V, VI y VII), coordinando
con ella sus respectivas antologías. Además, ellos fueron los principales
impulsores de la creación del RINCÓN DE
LA POESÍA en el Parque Genovés de Cádiz.
MORIR EN TU ARDIENTE
PECHO DE ARENA
Permíteme
asomarme a ti. Espérame.
Espera un
poco, voy a acomodarme a tu lado,
junto a tu
ardiente pecho
blanco,
suave, aplaterado,
que reposado
se desliza
entre mis
dedos de amor.
Bésame todo
mi cuerpo,
yáceme,
sedúceme, abdúceme.
Embriágame,
perfúmame de sal,
rodéame los
músculos,
mis brazos,
mis muslos…
Fráguame mi
tersa piel,
para
desinhibirme en tus rocas.
Voy a
respirar profundamente
tus sedosas
y delicadas algas…
que llenan
de sal mi boca.
Y tú conmigo,
mímame
dame unos
gramos más de vida.
Bésame con
tu espuma y tus lamentos, relámeme.
Bésame con
tu pasado y tu futuro.
Bésame con
los siglos, con los sinos.
Que quiero
renacer a tu belleza
y lamerte
las heridas sin control.
Que quiero
amarte y sentir tus pesares,
vivirte
eternamente envuelto en tus fragancias.
Que quiero
gozarte retozando en ti
y llenarme
de tus placeres ilimitados,
para
alcanzar el éxtasis salino.
Dormitarme
en tu idílico regazo marino,
en sosegado
arabesco de Debussy,
en traviesa
flauta travesera de Vivaldi,
en reflexivo
y exultante concierto de Aranjuez,
relajado y
vivo.
Que quiero
morirme a ti ceñido,
enlazado a
tu mirada virgen.
Morir en ti,
mar de caleta,
que me
amamanta de sinfónicas oleadas,
a llamaradas
de sol y de agua.
Oh, Caleta,
breve y quieta,
permíteme
morir en tu pecho de arena,
con tus
luces y tus deseos,
con tus
voces y tus amoríos,
con tu talle
que me enrabieta,
con tu alma
de mar terrena
con tu
sílfide silueta.
Oh, mar de
mar. Mar de Caleta.
Oh mítico
atlante que besaste mi playa,
llévame a
tus orillas,
a tu hermosa
isla de Falla,
que sea mi
partida gloriosa
desde las
incólumes columnas
