miércoles, 22 de septiembre de 2021

PEDRO JAVIER MARTÍN PEDRÓS

 


Me lleva a escribir poesía el convencimiento que la poesía es vida 

y al compartirla con los demás la hago más hermosa.

 

Pedro Javier Martín Pedrós nace en Huelva. 

 

Sus poemas se encuentran recogidos en varias antologías desde el año 1.976.

 

Participa en encuentros  de poetas por toda la geografía nacional.

 

Es colaborador de varios proyectos solidarios poéticos.

 

Forma parte del colectivo de Poetas de Huelva por la paz.

 

Es invitado a formar parte de Pliegos del Cincuentenario de la Editorial Corona del Sur. 

(1.965-2.015), habiendo participado en varias antologías de dicha Editorial.

 

Fundador y director de la Colección Poesía en la distancia, que consta en la actualidad de 

siete libros.

 

Finalista del V Certamen Umbral de poesía de Valladolid 2018. 

 

Tiene publicados los siguientes libros:

 

Trozos de vida, Huellas de Agua, Travesía Interminable , En la bajamar , Soledades, 

Poemas para la vida, Abriendo ventanas, Miro el reloj y quedo ciego.

Y con Ana García Briones tiene publicado el libro: Violines sin música. 

 

Actualmente prepara una antología.

 

Algunos de sus libros forma parte del fondo bibliográfico de la Librería Lello,Oporto (Portugal).

Participa en distintos portales literarios.

 

Ha sido seleccionado para la Antología Internacional Grito de Mujer,  editada en República 

Dominicana.

 

 

Es coordinador del Blog literario Azuldemar: http://huelvasurlibre.blogspot.com.

 

 

 


 

POEMAS

 

 

La poesía es algo

que

sólo la entendemos

los locos

que nos

emborrachamos

con las palabras.



Para mi corazón basta tu pecho,

para tu libertad bastan mis alas.

Desde mi boca llegará hasta el cielo

lo que estaba dormido sobre tu alma.

Pablo Neruda

 

Un pentagrama lleno de luz

acaricia cientos de manos tendidas.

Otro de generosidad

abre puertas de sentimientos

agrietados.

La gente espera  el canto galopante

-del  más amor-

donde nacen canciones

que solo,

solo,  las entienden los sencillos

de ojos esperanzados

que aman sonidos

con olor a libertad.

Así, de repente,

hablan las guitarras

de la tierra prometida

conjugando verbos  inacabados.

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