domingo, 2 de noviembre de 2025

MARI CALLEALTA TORRES

 

Diplomada en Ciencias de la Educación por la Universidad de Cádiz. Miembro de diversas asociaciones de escritores y portavoz en Málaga de la Asociación andaluza cREA. Participa en encuentros internacionales de poesía y organiza eventos poéticos en formato presencial y virtual.

Sus poemas están recogidos en dos libros, antologías, espacios culturales de radio, programas de la televisión local de Málaga y revistas especializadas de la Junta de Andalucía.

Premio a la creatividad” en la XX Convocatoria Literaria Fundación Naji Naaman 2022

Una de sus mayores pasiones es su trabajo, rodeada de niños y niñas, y el fomento de la lectura y la escritura en proyectos de biblioteca escolar.

Es una gran satisfacción ser homenajeada en Tetuán, desde la Fundación Mgara Rebahi, en el XII Encuentro Hispano Marroquí de Poesía "Rafael Guillén" Febrero, 2025.


HAY COSAS QUE NO ENTIENDES


Yo, que estoy hecha de miradas de todo

y miradas de nada.

Van demasiado lejos los pájaros

en ese cielo sin fondo

que no consigo alcanzar a ver.

Y aquí, tan cerca, el azul de tus ojos

a ambos lados de mi horizonte.

Hay cosas que no entiendes.

Yo, que arrastro batallas detrás de alguna fecha,

soy tan sensible que anochece de golpe

y tengo miedo porque la oscuridad

me roza en los labios tu ausencia.

Todo me llega débil como si tu beso fuese humo

sin nada que decir, deshaciéndose.

Yo que estoy hecha de retazos de presente

pero, en permanente asombro,

todos los futuros me alcanzan

cuando hablo en tu voz y me dices “te amo”.

Tu aroma se acomoda sobre mi cuerpo,

la ternura sobre el costado.

Incluso a veces todas mis vidas parecen hallarse

en el último suspiro,

ese que ya se agotó antes de salir de mi boca.

Hay cosas que no entiendes.

Parece que ya he soñado todos los sueños.

No, no entiendes que hay cosas

que ni yo misma sé explicar.


TODO


El reencuentro. Mucho más que un simple latido.

Tu aliento en mi cuello en plena meditación

de quien sabe ahondar en mi silencio.

El sonido se atempera en los labios.

Desnudo el tacto debajo de mí, encima,

verticalmente el frescor ácido entre las palabras.

Expresar el deseo con diferente mirada

hasta tenerlo todo como la voz de un mar

que me castiga y me seduce a la espera del roce.

Mucho más que un simple comienzo.

El agua repitiendo nuestros nombres.

Y descifrar sus secretos, abarcar el instante,

palpar la oscuridad con la sed

llenando de impulsos la boca,

porque tú, porque todo.

Nombrarme en el desgarro, contigo,

en el vértigo de la totalidad.

Escuchar la piel en la respuesta

temblando entre los dedos.

El reencuentro. Todo.

Mucho más que una mano que desviste al cuerpo.

Mucho más.



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