En primer lugar agradecer la oportunidad que
se me brinda participando en este evento
de relevancia poética, en un entorno tan emotivo.
Mi carta de presentación no puede ser otra
más acorde a las circunstancias, amante y creador de poesía desde la infancia.
En la actualidad trabajo en una empresa de
frio industrial en el departamento técnico, desempleando labores
administrativas y de diseño gráfico.
No guardando relación alguna con la poesía,
ello no impide que siga el camino que empecé hace tantos años en la lectura y
escritura poética.
Celebrado un taller de poesía en la ciudad de
Lucena al cual asistí, afortunadamente, me abrió las puertas que tanto tiempo
mantuve cerradas.
Gracias a los representantes de dicho taller
los señores y poetas D. José Puerto y D. José Manuel Pozo me pusieron en conocimiento de la existencia
de una asociación (NAUFRAGIO) con sede en Lucena y Cabra, en la que el interés por la poesía es común y
me alegra pertenecer.
Por medio de dicha asociación, este año he
colaborado en dos recitales poéticos;
·
NOVEDADES DE LA POESÍA EGABRENSE ( POESÍA A
PIE DE CALLE )
·
COSMOPOÉTICA (LA CIUDAD DE LOS VERSOS )
Nacido en Asturias, a la edad de tres años
fui trasladado a la provincia de Granada.
Transcurrí mi infancia en un pueblo de la
Alpujarra donde antes de terminar la EGB fui trasladado a la ciudad donde
concluí con los estudios primarios
(graduado escolar). Siempre había colaborado tanto en escritura como en dibujo
(revistas del colegio, concursos, etc.) no llegué a terminar mis estudios de
bachiller entrando en contacto con la vida laboral.
Mi formación fue conseguida a base de cursos
formativos.
Ello nunca impidió que siguiera
escribiendo y no abandonase la poesía.
Escritores como García Lorca, Miguel
Hernández, Machado, Alberti, Juan Ramón Jiménez etc. Una gran lista que hoy en
día continúo ampliando.
La poesía convertida en música, también
despertó mi entusiasmo por escribir y expresarme poéticamente:
·
Luis Eduardo
Aute.
·
Joaquín
Sabina
·
Silvio
Rodríguez
·
Carlos Cano
·
Pablo
Milanés
·
Pastora Vega
·
Antonio
Flores
Un sin fin de autores que tienen mucho que
cantar y contar.
TODO TIENE UN COMIENZO Y ESTE SERÁ EL MIO.
Gracias de antemano.
Cristóbal Martínez
EL EMBARGO AMARGO
Este regalo estrangulado
por el lazo de la sorpresa,
este beso robado
de la boca de la razón.
Esta verdad escrita
por la mano sin corazón.
Este día que se esconde
de vergüenza idolatrado,
las horas son presa
de un reloj bancario.
El futuro nos rescata
de un presente por venir.
La vida se disfraza
para no ser reconocida
por si vuelve la esperanza
despedida en su día.
Nos desahucia la razón
por no saberla conservar,
donde vivía un sentido; el común
abandonado en un desván.
Pozo de los deseos,
agujero en el espacio
“vísteme despacio”…
En mi mano dos dedos
simbolizan el sueño
de aquel que no tiene dueño
y que nunca cede,
¡¡victoria!! gritó el poeta
Escrita a puño y letra
Sino ha llegado, para cuando llegue.
Cristóbal Martínez
ESPERA, ESPERANZA
Confiar en la esperanza
con una sonrisa,
que jocosa evoca a la espera.
La sonrisa,
la última palabra de una frase
inacabada,
de un cuento contado
que emula la realidad,
donde la esperanza
representa un color
enemigo del otoño.
Sobrevive en la bola de cristal,
esa que calla lo que ve
disfrazando la verdad.
Aun me sigo preguntando;
-¿a qué espera la esperanza?-
y sigue sin contestar,
así se mantiene viva
y así todo nos da.
Cristóbal
Martínez.
CUENTA CONMIGO
Prometo no olvidarte
aun sin pensar en ti.
Mil formas para imaginarte
y una vida para compartir.
Cien manos que te abracen
como estrellas te acompañen en el cielo
Que mis versos te den alcance
si mi presencia cae en destierro.
Que no te confunda la noche
ocultándote de la luz del día,
Se lo pedí a la luna
para cuidarte a escondidas.
¿Quién dijo olvidarte?
Yo no dudo ni lo invento
ni dejo descansar el tiempo.
Aun sin pensar en ti
quedó marcado el recuerdo,
desconfiando del presente
viendo las horas pasear.
Esa musa que yo tengo
cuando me vino a visitar,
lo hizo bajo juramento
cumplido con lealtad.
¿Realmente desean
acercarse a ese momento?
En el cual la encuentro
rompiendo la distancia
que fragua el olvido
para cumplir lo prometido.
Cierren los ojos
y en silencio escuchen…,
escuchen su latido…
llegó la hora de recitar.
Cristóbal Martínez.
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